2A_11: Hijo/a de Mi Corazón, entrégame tu carga, tú estás fatigado de portarla. Déjame tomarla en Mis espaldas para darla a mi Padre. Tú te vuelves libre, el Amor te hace libre. Feliz tú que te dejas conducir por el camino de la libertad y así volverte Amor. Locamente, Yo te amo.

1F_03: Hijo/a mío/a, sí, Yo soy tu Dios y me ocupo de los detalles más pequeños, aún si no tienen importancia, porque te amo, porque quiero una unión total con tu corazón, porque me has dado tu sí.

1C_25: Hijo/a mío/a, ven a reposarte en Mi Corazón, dame tu carga. Tú encontrarás que Mi yugo es ligero. Con tu permiso, corto las cadenas una por una para que te vuelvas libre completamente. Tu libertad reside en tu corazón. Quiero volver libre tu corazón, porque lo quiero para Mí.

3A_12: Hijo/a mío/a, nosotros nos volvemos cada vez más íntimos, y es en esta intimidad que opera la transformación en ti, que te aporta la Paz, la Alegría, la Serenidad y el Amor. Esta intimidad, Yo la deseo siempre creciente... con cada una de las personas que viven en esta tierra. Por esta intimidad será derrivado el Adversario, en el momento en que él creerá tener la victoria.

3A_35: Hijo/a mío/a, tú debes de recordar que Mi deseo es que te reconozcas humilde; que seas dócil y maleable para cumplir la Voluntad del Padre; que te apresures a acoger el raudal de Amor que el Padre quiere derramar en ti en este momento, y siempre más, y especialmente al momento de la Eucaristía.

1C_22: Hijo/a mío/a, la Volountad del Padre, es que Sus hijos de la tierra vivan plenamente en su Amor. Volviéndote Amor, tú realizas su Voluntad. Tú te transformas en Fuego de Amor que enciende el Fuego en los corazones de aquellos y aquellas que el Padre te confía. ¿Quieres amar tanto?

1B_16: Hijo/a mío/a, corro hacia ti para ayudarte. Te tomo en Mis brazos; déjate reposar contra Mi Corazón. Repíteme tu amor. Tu necesidad es ante todo de sentirte querido: Yo soy la Fuente del Amor. Como te quiero, te quito el peso de tus preocupaciones; entrégamelas para que Yo pueda actuar.

1F_37: Hijo/a mío/a, como el sol y la lluvia hacen crecer a la flor, el fuego y la lluvia de Mi Amor dilatan tu corazón para volverlo resplandeciente de Mi Amor. Tiernamente, te amo.

1A_19: Hijo/a mío/a, es necesario que tú resplandezcas en santidad, y cuando las personas estén en tu presencia, ellas serán transformadas no por lo que tú vas a decirles, sino únicamente por lo que eres. ¿Aceptas de ser este instrumento?

3B_01: Hijo/a mío/a, para saber cómo comportarte ante el sufrimiento, tú no tienes sino que mirar Mi conducta: ¿Es que Yo desistí? ¿Intenté disminuirlo? ¿De cambiar la conducta de los otros? Yo lo acogí y lo viví plenamente, para cumplir bien la misión que tenía y que era la Mía. De este modelo debes de inspirarte para vivir bien la misión que es la tuya. ¡Déjate conducirte! Te amo.