1D_36: Hijo/a mío/a, ven a refugiarte en Mis brazos. Es únicamente ahí por donde puedes entrar en la gran libertad de los hijos de Dios. Toma conciencia que cada vez que te agitas exteriormente, las angustias y las preocupaciones se amparan de ti; cuando vienes a Mí, tú descubres la Paz y la Alegría.