1C_20: Hijo/a mío/a, más te conviertes en Amor, más tu mirada es orientada hacia el Amor, más eres testigo de lo que Él realiza principalmente en los corazones. Volviéndote Amor, tú ruegas al Padre constantemente Conmigo y con Mi Santa Madre; son entonces multitudes de corazones que se abren al Amor y tú consuelas Mi Corazón. Te amo.