3A_26: Mi pequeño/a, cada vez que encuentras tu sufrimiento pesado y difícil de soportar, ven a lanzarte a Mis brazos. Entrégame tu sufrimiento y encontrarás que Mi yugo es ligero. No temas, he escuchado tus oraciones y tus súplicas. Tú has encontrado gracia ante Mis ojos. Mi Corazón arde de Amor por ti.