2A_38: Hijo/a mío/a, desciende profundamente cada vez más en ti, para entrar en una intimidad más grande Conmigo. No te preocupes de los pensamientos del mundo. Recuerda que una sola y única cosa importa: la intimidad que tenemos juntos, esta intimidad que te conduce allí en donde el Padre quiere que estés y que Le permite realizar la misión que Él quiere llevar a cabo a través de ti.